Empresas comprometidas contra la discriminación, empresas sostenibles para el futuro
El 21 de marzo se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, cuyo objetivo es fomentar una cultura mundial de tolerancia, igualdad y antidiscriminación. Pero también es un llamamiento para que todo el mundo se levante contra los prejuicios raciales y las actitudes intolerantes.
Para el sector empresarial es una buena ocasión para unirse a este objetivo, escuchando y dando respuesta a las demandas y exigencias de los consumidores y de la sociedad en la que opera. El futuro de las empresas no pasa solo por generar beneficios económicos, sino también por la creación de un impacto positivo en la sociedad en la que se integran, algo que cada vez más está en el punto de mira de todos los grupos de interés, especialmente entre la población más joven.
Son muchas las empresas que ya están siendo ejemplo y referente en este sentido mostrando su apoyo a movimientos sociales comprometidos con la igualdad de trato y la no discriminación, como es el caso del movimiento #BlackLivesMatter, poniendo el foco en la creación de acciones específicas que visibilicen su rechazo por cualquier comportamiento discriminatorio o conducta de carácter racista o xenófoba y mostrando, al mismo tiempo, su compromiso por políticas corporativas creíbles a favor de la igualdad de oportunidades.
¿Con qué acciones y medidas pueden contribuir las empresas a la no discriminación?
- Sensibilizar y promover actitudes positivas respecto a la diversidad en el entorno empresarial, promocionando la igualdad y no discriminación por razón de raza u origen a través de talleres y formaciones de sensibilización dirigidos a la plantilla para ayudar a promover una cultura empresarial inclusiva.
- Poner a disposición canales y protocolos internos que ayuden a identificar posibles situaciones de discriminación en la seno de la organización que permitan abordarlas de manera responsable y eficaz.
- Establecer medidas de discriminación positiva en la contratación de colectivos subrepresentados.
- Visibilizar, a través de los diferentes canales de comunicación externa de la compañía, su compromiso por la igualdad de oportunidades y no discriminación y refleje el valor de la diversidad cultural.
- Comunicar sus buenas prácticas en esta materia con el fin de actuar referente para otras empresas y la sociedad en general ayudando a su vez a romper prejuicios y estereotipos entorno a las personas de origen extranjero.
Desde Accem, a través del proyecto DIVEM, ayudamos a las empresas a aprovechar el valor estratégico de la diversidad cultural y el papel que tienen las empresas a la hora de generar un cambio social que mejore su sostenibilidad a largo plazo y beneficie, al mismo tiempo, a toda la sociedad.
