Olatz Merino, mánager de RSC en Sigma AI: “Las empresas necesitan un liderazgo fuerte y valores claros si quieren cambiar y tener un impacto en la sociedad”

Sigma AI es una empresa española con proyección internacional con más de 30 años de experiencia en la recopilación, tratamiento y provisión de datos y con el objetivo puesto en la generación de nuevas inteligencias artificiales más competentes y con un mayor toque humano. Hablamos con Olatz Merino, responsable de RSC, sobre la importancia que ha adquirido la gestión responsable y adecuada de la diversidad cultural en el seno de esta compañía y cómo abordan la sensibilización de todo su equipo en este ámbito, gracias también al apoyo que brindamos desde DIVEM para este propósito.

Sois una empresa que trata a diario con personas de orígenes muy diferentes y en vuestro ADN contempláis más de 100 nacionalidades diferentes. ¿Qué importancia tiene para Sigma AI realizar acciones que favorezcan y valoren la diversidad cultural?

La diversidad forma parte de Sigma desde el momento de su fundación. Como bien dices, es parte de nuestro ADN. En Sigma hemos trabajado con colaboradores de más de 100 nacionalidades diferentes y contamos con un abanico de culturas y sensibilidades que difícilmente se encuentran en otra empresa, ya que nuestros servicios sirven para construir la Inteligencia Artificial que se usa globalmente.

Por este motivo, mantener y gestionar correctamente esta enorme diversidad es fundamental para conseguir una IA que sea reflejo de la sociedad reflejando su diversidad, que esté libre de sesgos y que sirva para el desarrollo de todas las personas, independientemente de su origen, situación económica o sensibilidades.

La IA se empezó a desarrollar en inglés, pero gracias a la colaboración de empresas como Sigma, el resto de idiomas, nacionalidades y culturas van estando representadas, pudiendo beneficiarnos de las aplicaciones y utilidades que la IA proporciona.

¿Qué os motivó a uniros a DIVEM y qué valor creéis que puede aportar a su empresa?

Cuando nos planteamos la necesidad de formar a nuestros empleados en una materia tan específica, especializada y delicada como es la gestión de la diversidad cultural, buscamos una entidad con la experiencia y conocimientos en la que poder confiar.

Sigma comenzó a trabajar con Accem en 2019, cuando contratamos a personas refugiadas y solicitantes de asilo a través de esta ONG como traductores y anotadores. Esta colaboración permitió ofrecer una oportunidad laboral de calidad para las personas que llegaban a nuestro país, al tiempo que Sigma sumaba a su proyecto la experiencia y conocimientos que estas personas aportaron.
La sensibilidad, la experiencia y los conocimientos de Accem sobre los desafíos de adaptarse a las diferencias culturales fue la opción natural para ofrecer la formación que ofrecimos a todos los equipos de Sigma en nuestra Semana de la diversidad cultural, para fomentar una gestión responsable de la diversidad y facilitar la detección y la eliminación de sesgos inconscientes.

¿Puedes hablarnos de las acciones que habéis realizado y qué os movió a desarrollar la semana de la diversidad cultural en Sigma AI?

En Sigma, la diversidad es una de nuestras líneas prioritarias de acción en RSC/ESG. A diario compartimos espacio de trabajo, tanto presencial como virtual, personas de más de 50 nacionalidades distintas; nuestras edades, culturas y sensibilidades son muy diferentes, pero nuestros objetivos son comunes, todos juntos formamos Sigma. Esta diversidad genera retos en las relaciones laborales y personales tanto horizontal como verticalmente, por lo que en Sigma trabajamos la mejora del ambiente laboral y la sensibilización en materia de diversidad a diario. Todas las acciones de RSC incorporan alguna tarea o línea de trabajo en la que se trabaja la convivencia, el apoyo y respeto mutuo y el conocimiento y sensibilización acerca de la diversidad.

Estas actividades ponen de manifiesto la riqueza que la diversidad aporta tanto a nuestra empresa como a cada persona en particular. Y nada de esto no se podría hacer sin el apoyo incondicional de Dirección General, desde donde —tengo que decirlo— parten la mayor parte de las iniciativas. Así, no sería posible nada de esto sin una implicación directa de la alta dirección.

Colaborando con distintas Asociaciones y Fundaciones especializadas en la atención a personas con diversidad funcional, organizamos encuentros con personas que han superado grandes retos debidos a sus peculiares características, actividades para estimular y mejorar las relaciones entre las personas,  pero sobre todo, día a día, practicamos, estimulamos y premiamos la empatía, la generación de equipo, la comprensión y la ayuda mutua.

La necesidad de dotar a toda la plantilla de herramientas, estrategias y conocimientos específicos en torno a la diversidad, así como el conocimiento de que la sensibilización se ve favorecida por una mayor duración de las acciones, nos hizo decantarnos por el formato de “Semana de la diversidad”, con tres jornadas dedicadas a la formación y a compartir las experiencias personales. El formato ha resultado todo un éxito, porque ha permitido convertir las formaciones en una experiencia vital. Hemos estado toda la semana hablando de diversidad, poniendo en común distintos puntos de vista, incluso hemos tenido testimonios muy emocionantes de alguna persona trabajadora que ha querido compartir con sus compañeros su experiencia personal en la que su propia diversidad ha sido un elemento favorecedor a la hora de formar parte de Sigma.

¿A qué desafíos os habéis enfrentado al atender y brindar servicios a clientes de diferentes orígenes y culturas y cómo los habéis resuelto?

Uno de los desafíos de la IA es crear modelos que traten de manera justa e igualitaria, sin sesgos ni prejuicios que puedan llevar a discriminaciones o injusticias en su aplicación. Sigma cree que es importante mostrar tanto a nuestros clientes como a nuestros empleados que somos sensibles a las diferencias culturales y, para ello, tenemos múltiples líneas de acción. Por un lado construimos relaciones sólidas con nuestros clientes en las que podemos plantear y proponer soluciones para evitar los sesgos en los modelos. Encontrar puntos en común y generar confianza son algunas de las formas en que nuestros gerentes de proyecto y directores de equipos pueden iniciar estas conversaciones.

Como empresa especializada en el campo de la anotación de datos para Reconocimiento de Voz y PNL es muy importante mostrar a nuestros clientes que contamos con un equipo multilingüe. Contratamos a personas de diferentes nacionalidades y habilidades lingüísticas e incluimos un equipo diverso en los proyectos de los clientes, proporcionamos informes trimestrales a nuestros clientes en los que valoramos la representación de colectivos normalmente infrarrepresentados y explicamos las acciones de apoyo para la captación y apoyo a los mismos… Estos reportes nos permiten seguir trabajando nuestro compromiso con la diversidad, la inclusión y la sostenibilidad, al tiempo que nos planteamos nuevos objetivos, valoramos la evolución y tratamos de seguir mejorando continuamente.

También estamos comprometidos con la preservación de idiomas en peligro de extinción y trabajamos en proyectos que aumentan la accesibilidad a la IA en idiomas desatendidos de zonas en vías de desarrollo o lugares prácticamente inaccesibles. Somos una empresa bilingüe (español e inglés), pero apoyamos a los empleados en muchos otros idiomas. Nuestros gerentes de proyectos multilingües son seleccionados y capacitados para la sensibilidad intercultural y para pueden satisfacer mejor las necesidades del miembro del equipo que respalda el proyecto, teniendo en cuenta los idiomas nativos, las experiencias y los intereses.

¿Creéis que es necesario formar tanto a los empleados como a la alta dirección en materia de diversidad cultural y que puedan desarrollar competencias interculturales y entornos inclusivos?

Sí, sin duda. Sigma tiene una fuerza laboral notablemente diversa. Dada la diversidad de nuestros equipos, encontrar puntos en común y aprender de nuestras diferencias es necesario para nuestro éxito.

La inclusión es uno de los valores de Sigma, y ​​esperamos que los líderes sénior modelen, den ejemplo y lideren los valores de la empresa. Esto comienza con aprender a detectar y neutralizar los sesgos inconscientes que todos tenemos, contratar equipos diversos y aprender y respetar las diferencias en nuestro trabajo diario. Queremos que todos se sientan bienvenidos en el trabajo. Brindar educación sobre la inclusión, la diversidad y el control de sesgos proporciona una base sólida para comprender de dónde provienen los colegas y mejorar las competencias interculturales, tanto en el entorno laboral como en el personal.

¿Creéis que es importante sensibilizar y capacitar a los empleados de la empresa para lograr entornos interculturales equitativos e inclusivos?

Sí. Apoyar y mejorar el entendimiento intercultural es algo en lo que Sigma trabaja continuamente mediante capacitaciones y eventos informales que reúnen a los empleados. Por ejemplo, hemos ofrecido tres programas de formación a través de Accem: dos de ellos dedicados a la gestión de equipos culturalmente diversos y otro enfocado a la detección de sesgos inconscientes y su neutralización. En ellos aprendimos el impacto que pueden tener los sesgos inconscientes desde el momento de la contratación hasta la preparación de un trabajo, pasando por la experiencia diaria.

Nos hemos dado cuenta de la importancia de gestionar bien la interculturalidad para no crear situaciones injustas con las personas por el mero hecho de haber nacido en un lugar determinado, con unas condiciones económicas determinadas o haber sido educadas de una forma determinada. Los materiales que ha compartido Accem a lo largo de las formaciones, con ejemplos concretos en primera persona, han sido muy impresionantes para todos nosotros, y a muchos nos han abierto los ojos a situaciones y experiencias de las que no éramos conscientes hasta ese momento.

¿En qué medida las empresas tienen capacidad de transformación para lograr una sociedad más inclusiva, equitativa y con diversidad cultural? ¿Qué papel tienen que adoptar las empresas para conseguir este objetivo?

Las empresas necesitan un liderazgo fuerte y valores claros si quieren cambiar y tener un impacto en la sociedad. La inclusión es algo en lo que Daniel Tapias y Nuria Gómez, los dos socios fundadores de Sigma, han creído y apoyado desde los inicios de la compañía hace quince años. Dar un ejemplo público positivo al contratar y apoyar diversas culturas, nacionalidades y sensibilidades es otra forma en que las empresas pueden demostrar sus valores.